Es particularmente grato encontrarme en esta casa de la integración luego de tres años del Decimotercer Consejo de Ministros, en representación del Señor Canciller de la Republica quien lamentablemente por razones de agenda de último momento, no ha podido participar en este conclave ministerial. La reunión que nos convoca el día de hoy reviste una especial importancia pues deberemos definir las directrices futuras para continuar con la conformación gradual y progresiva del espacio de libre comercio (ELC) prevista en la Resolución 59 (XIII). A este respecto, el arduo trabajo desarrollado por el Comité de Representantes en los pasados tres años, del cual fui participe directo cuando ejercí la presidencia de dicho órgano permanente durante el primer semestre de 2007, ha permitido realizar avances sustantivos en la construcción del Espacio de Libre Comercio, pero hoy nos toca dar un nuevo impulso mediante la aprobación del conjunto de resoluciones que tenemos bajo nuestra consideración. Mi delegación reconoce que los proyectos de resolución en cuestión pueden no ser plenamente satisfactorios ni lo ambiciosos que hubiéramos deseado. Sin embargo, no dejamos de valorar este importante esfuerzo para tratar de alcanzar textos, elaborados sobre la base de “mínimos comunes denominadores”. Entendemos que su redacción es el reflejo de la voluntad política y de la realidad existente hoy en día en la región y que constituye una formula de transacción entre lo deseable y lo posible. Los informes presentados por el Presidente del Comité de Representantes y del Secretario General de la Asociación dan cuenta de los progresos que se han logrado en la materia y nos reafirma la necesidad de continuar, conforme a lo establecido en el párrafo 8 de la Resolución 59, con la actual estrategia negociadora profundizando los acuerdos de libre comercio y promoviendo las negociaciones en curso o las que se emprendan para suscribir acuerdos de libre comercio entre los países que aun tienen acuerdos de preferencias fijas. El Perú, dentro de este marco, no solo ha concretado un acuerdo con el MERCOSUR, el ACE Nº 58, sino que también estamos en plenas negociaciones con México y tenemos concluido un acuerdo con Chile pendiente de ratificación. En materia de normas y disciplinas necesarias y esenciales para el libre comercio, ratificamos nuestra posición de proseguir con los trabajos, en un mismo nivel y con una mirada a futuro, ya sea que se trate de reglas de origen, salvaguardias, restricciones no arancelarias, solución de controversias, medidas sanitarias y fitosanitarias y normas técnicas, teniendo en cuenta las prioridades establecidas por los Altos Funcionarios Responsables de las Políticas de Integración en sus reuniones de 2006 y 2007, así como la hoja de ruta establecida para esta etapa en el Programa de Trabajo Preparatorio de este periodo de sesiones del Consejo de Ministros. En este marco y con el fin de avanzar y profundizar en los esfuerzos hacia la construcción del Espacio de Libre Comercio, por iniciativa de nuestra delegación se pudo convenir en la convocatoria a la Conferencia de Evaluación y Convergencia en el contexto de la conformación de dicho espacio y conforme a las atribuciones que le confiere a este Órgano político el Articulo 33 del Tratado de Montevideo 1980. Estoy seguro de que los resultados que emanen de dicho foro, obtendremos propuestas de lineamientos de política que nos permitirá avanzar hacia la consecución de nuestro objetivo. Señor Presidente: El Perú es un país convencido de que la integración económica y comercial constituye una clara opción de desarrollo y un instrumento de política para mejorar los términos de inserción dinámica y competitiva en el proceso de globalización económica, significando una herramienta fundamental para posicionarse eficientemente en ese proceso, generar fuentes genuinas de empleo y coadyuvar a la cohesión e inclusión social. En este sentido, el Perú manifiesta su firme compromiso con el fortalecimiento y consolidación del proceso de integración regional como opción estratégica de política exterior para proyectarse de manera competitiva en el mundo globalizado. En este ámbito, la convergencia de la Comunidad Andina y el MERCOSUR, teniendo como telón de fondo la unión de naciones sudamericanas (UNASUR), creada en la cumbre de Cusco en diciembre de 2004, debe constituir la columna vertebral para alcanzar el objetivo de la construcción progresiva del espacio de Libre Comercio al interior de la ALADI, en concordancia con lo establecido en la Resolución 59 (XIII), proceso al que indudablemente deben sumarse México y Cuba. Asimismo, expresamos la especial importancia que tienen para nuestro país los mercados regionales para las exportaciones e importaciones, tanto de bienes como de servicios y las inversiones, sin perjuicio de la agenda multilateral comprenhensiva que tiene el Perú en el contexto de un “regionalismo abierto”. Señor Presidente: Esta Asociación debería ser el motor de la integración de la América Latina, respondiendo al desafío de acompañar la velocidad y profundidad de los cambios que siguen produciéndose a escala mundial, hemisférica y regional. En este sentido, quiero expresarles la certeza de que en medio de la creciente globalización de la economía, la convergencia de políticas y la unión de mercados entre países que comparten un espacio geográfico e intereses comunes, así como un patrimonio histórico y cultural similar, constituyen una opción de la mayor relevancia y viabilidad que permitirá además incrementar el peso relativo de nuestra región en el nuevo contexto internacional, así como mejorar la competitividad y participación de nuestras economías en las corrientes mundiales de bienes, servicios, capitales y tecnología. Por esas razones reitero la vocación integracionista del Perú, a la vez que invoco a la permanente voluntad de nuestros países de seguir trabajando hacia la consecución de los objetivos trazados. Lo anterior cobra mayor relevancia teniendo en consideración a la difícil coyuntura económica mundial, que ha ingresado en una fase de franca desaceleración, y aunque la región está ahora en mejores condiciones para enfrentar un shock externo, el estrechamiento de los lazos de integración se convierte en un mayor imperativo. Señor Presidente: Finalmente, quiero aprovechar la oportunidad para expresar mi especial reconocimiento y gratitud al actual Secretario General de la ALADI, Dr. Didier Opertti, quien supo conducir a la Asociación con comprobada eficiencia y probidad. He sido testigo de su idoneidad y profesionalismo, así como de su continua preocupación por hacer de la ALADI una organización moderna, eficiente y ágil, su derrotero de excelencia y entrega marcaran sin duda el sentido de los futuros trabajos de esta organización. De igual modo, deseo expresar mi más calida felicitación al Embajador Bernardino Saguier por su próxima designación al cargo de Secretario General de la Asociación. No dudo que su trayectoria y amplia experiencia en la temática de la integración es garantía de una gestión exitosa al frente de la organización.
Muchas Gracias |