 | Muy buenos días, casi buenas tardes, señor Presidente del Comité de Representantes, señor Secretario General, Subsecretarios, colegas Embajadores, Representantes Alternos, distinguidos observadores que nos acompañan. 6
Como decíamos en México, no hay fecha que no se cumpla, y si bien el cargo que me encomendó el Presidente Peña concluirá hasta la primera quincena de abril, ha llegado la hora dolorosa de la despedida.
Como saben, no soy un diplomático de carrera sino un político de toda mi vida, sin embargo, en la ALADI, gracias a la valiosa amistad y a la experiencia previa como legislador siempre me sentí como en casa. Después de todo, el trabajo en ALADI se asemeja, en muchos aspectos, a los usos y costumbres de la práctica parlamentaria en nuestros países.
Durante mi encomienda, tuve el privilegio de compartir con cada uno de ustedes grandes experiencias y, sobre todo, entablar una amistad que ciertamente va más allá de mi estadía institucional en esta ciudad.
Algunos colegas han partido previamente a otras responsabilidades profesionales, antes que un servidor, y otros lo harán posteriormente, pero por alguna razón todos coincidimos por algún tiempo en esta casa, en la casa de la integración de Latinoamérica. Diría por ahí una canción “coincidir”, aquí nos tocó coincidir a todos nosotros.
Me llevo muchos y muy buenos recuerdos de todos ustedes, más allá, como lo decía Carlos, como lo decía el “Chacho”, de la parte institucional, especialmente de la parte personal.
Con nuestro querido “Chacho” tuve la oportunidad de viajar más de una vez a México y como el bien lo comentaba, los viajes permiten más allá de la relación profesional e institucional, poder conocer de fondo a las personas. Fue un privilegio poder compartir momentos, viajar, conocer Nicaragua, Guatemala y estar en México con él en dos ocasiones. Por supuesto que falta que me lleve a Argentina pero ya estaremos por allá próximamente, en la EXPO 2015, con Rubén Ruffi.
Nunca voy a olvidar la gran habilidad que tiene Carlos para manejar su oratoria en distintos auditorios, porque me tocó estar con él cuando participaba con un grupo de estudiantes, que todos sabemos que tal vez el auditorio más difícil es precisamente cuando hay 300, 400, 500 estudiantes, porque son impredecibles, como pueden interesarse en las palabras del orador pueden aburrirse o pueden inclusive tener opiniones distintas; ahí, me tocó conocer la capacidad de oratoria y la capacidad política de Carlos; y en otros auditorios con Ministros, con empresarios, tenía sin duda para cada uno de ellos un lenguaje distinto pero con el mismo contenido, la importancia de la integración de Latinoamérica.
Quisiera también, si me lo permiten, referir brevemente a algunos pasajes con ustedes, estimados amigos y Embajadores representantes de sus países.
Con Ruffi, le agradezco el apoyo y la experiencia que comparte en este Comité, siempre de manera profesional y seria. Yo considero que si alguien sabe a detalle los reglamentos, los artículos, el presupuesto, es él; con un gran compromiso, porque además de su tarea como Representante, desempeña con mucha responsabilidad la tarea que es complicada y que siempre va a ser complicada en cualquier lugar que es la administración, muy puntual y muy capaz. Gracias por todo ese empeño y nos sigues despidiendo a todos Ruffi (risas).
Por supuesto, una breve coincidencia con Juan Manuel, quien está actualmente en un foro político en Argentina, sin duda el más importante en cualquier país que es la cámara alta, que es el senado, desde aquí le mandamos un saludo a él y a su dificulta mucho la terminología de cómo decir los nombres, me decía, pronúncialo así y como quiera lo pronuncié mal, una disculpa Embajadora.
Primero, muy breve la convivencia con el Embajador Ruy Pereira, cuando yo llegué él se retiraba, pero en nombre del Brasil el obsequió un árbol a la residencia mexicana, árbol que planté junto con mis hijos para dejar ahí una huella en la residencia, está creciendo ese árbol muy bonito y ya tiene el doble de tamaño, afortunadamente prendió muy bien, y ese árbol que inició sin duda con usted ha abonado y va a crecer muchísimo. Le agradecemos mucho su calidez, su hospitalidad y como nos ha mostrado la belleza de su país y el compromiso que tiene con el mismo, ha sido un honor poder compartir con usted muchos momentos.
En el caso de Alejandro Borda, le admiro mucho, yo a veces cuando hay un tema en discusión me altero un poquito, me desespero, quisiera que saliera pronto, pero sin duda la paciencia y buscar el momento adecuado es cuando es correcto; me asombra y admiro en Alejandro su prudencia, su calma, su tranquilidad, y esperar a que se acomoden las cosas y el comentario pertinente para sumar y que se logren los objetivos. Muchas gracias por toda tu sabiduría y por toda tu paciencia. Sin duda Alejandro, te aprendí, nunca pierdes la calma, te felicito, yo me altero más fácilmente, es uno de los muchos dones que tienes.
En el caso de Emilio Izquierdo, compartimos innumerables charlas sobre temas que son para él fáciles, para mí difíciles, como el arte, la cultura, la escritura. En el caso también de Emilio el consejo prudente siempre. No es un tema de edad pero te veía como un tío al que iba y le pedía consejo cuando quería saber algo, no solo de los temas de la ALADI sino temas de la relación bilateral. Muchas gracias Emilio por tu siempre consejo oportuno. Lo hice antes y lo voy a seguir haciendo. Te aprecio mucho todas tus atenciones y a tu señora esposa.
Por supuesto que no puedo dejar de mencionar a una amiga que concluyó aquí su responsabilidad profesional, a Digna Donado, que fue un largo tiempo en mi estancia aquí Presidenta del Comité de Representantes. Yo simplemente diría que Digna tiene la habilidad para ser querida por todos y que la extrañamos mucho, a ella y a su extraordinaria voz y su capacidad de interpretar la música, que a algunos no se nos da pero a otros sin duda Dios los ha bendecido con esa cualidad y con otras.
En el caso de Venezuela, hubo algunos cambios en el proceso cuando me tocó llegar pero sin duda con Julio Chirino, que estuvo al inicio, luego se dividió la tarea, también se logró generar una gran amistad. Él tiene una gran identificación con México e inmediatamente hubo una muy buena química de amistad y profesional. Un saludo a nuestro amigo Julio.
Al Embajador Benjamín Blanco le admiro su gran seriedad exterior, pero la seriedad exterior es muy chiquita comparada con el corazón que usted tiene, su habilidad para negociar, para ver las cosas con calma y buscar al final que el resultado sea siempre positivo. Además debo reconocerle, me da mucho gusto la inercia que tenemos todos de que esta Asociación crezca, acciones como las que desarrolló usted para que su Presidente estuviera aquí hace unos días ayuda a que nuestra Asociación crezca y sin duda vaya tomando mayor relevancia. Lo felicito, ha sido un gusto también conocerlo.
A Mercedes Vicente, que diría, Cuba y México tienen muchos años de ser países hermanos. Mercedes, le deseamos que el tema que tenía de salud ya vaya en su fase final, desde aquí le damos un gran abrazo.
A mi estimado Hugo Saguier, el reconocimiento, si este fuera en la antigüedad un consejo de senadores, donde el senador más sabio es quien guiaba, de manera muy bajo perfil pero siempre con el comentario oportuno, buscando que sucedan las cosas, sin duda el maestro sabio, el senador sabio sería usted, y se lo digo con todo cariño, espero que lo tome de esa manera. Gracias Hugo.
Y a usted señor Presidente del Comité de Representantes, le tocó un gran tarea, sin duda junto con su país, soportar y reforzar la primera Expo ALADI, que si bien es cierto en un inicio era una duda para todos, hoy me da mucho gusto que Argentina esté anotado, que México esté anotado, y ya por ahí se rumora que otros países están interesados. Eso habla del trabajo que se realizó pero sobre todo que en el caso de Uruguay usted lo hizo de manera extraordinaria.
En el caso del Perú, a mí me toca irme y a usted le toca llegar, la coincidencia es mínima pero lo suficiente para estar muy seguro que vamos a construir buenas cosas como países, como lo hemos hecho en otro tipo de foros. Le deseo el mejor de los éxitos, y envidio que usted está llegando y yo me estoy retirando.
Y en el caso de Chile, si alguien conoce de México, es mi amigo el Embajador Contreras. Si alguien conoce de la hospitalidad de los mexicanos, de la gastronomía, de la solidaridad en la etapa difícil de otras naciones, es mi amigo. Inclusive cuando se presentó hace algunos meses la película de “Cantinflas”, platicando con el Embajador me di cuenta que él conocía más el tema que yo y le pedí precisamente que él fuera quien presentara la misma. Te diría Eduardo que ahí está el detalle, en el gran amor que le tienes a México y las puertas abiertas que tenemos para ti. Muchas gracias por querer tanto a mi país.
No me quiero extender en las palabras del corazón, en las palabras de sentimiento, y brevemente agrego algunos comentarios relacionados con la parte institucional.
Señor Presidente, señor Secretario General, concluiré mi encargo con una gran satisfacción de haber contribuido con un granito de arena a que los trabajos de esta Asociación cada vez sean mejores. Las iniciativas que desarrolló Chacho, con aprobación del Comité de Representantes, como lo fue precisamente la Expo ALADI, demuestran el compromiso que tenemos para seguir avanzando en esta gran tarea que es la integración de Latinoamérica.
Sin duda, las siguientes macrorruedas de negocios serán un éxito. Argentina lo será con la capacidad, con el profesionalismo de Ruffi. Anticipar que México con todo gusto participará como patrocinador, buscaremos el esquema y te lo informaremos a la brevedad posible, queremos que le vaya muy bien a Argentina y entonces, en consecuencia, le va a ir muy bien a México y a quien siga en la siguiente. Aprovecho aquí para reiterar mi afecto y admiración por la Embajadora Aida García Naranjo, quien fue precisamente la Presidenta el Comité de Representantes cuando la Expo ALADI Uruguay.
Me llevó también el gusto de haber visto como la agenda de nuestra querida Asociación se fue focalizando cada vez más para llegar a resultados concretos y tangibles en el corto, mediano y largo plazo. En este mismo contexto, el ver que nuestras reuniones en el Comité de Representantes cada vez alcanzaron mayores acuerdos y que estos fueran previamente consensuados entre nosotros, sin duda permitió que lográramos mayores y mejores metas, mas allá por supuesto de que tenemos diferencias, lo importante es que están sean respetadas y las coincidencias que se generaron.
La ALADI es la casa de todos y para todos, el punto de convergencia dentro de la diversidad que enriquece la integración latinoamericana por arriba de cualquier otra consideración particular. Hago votos porque la ALADI abarque a toda la América Latina y que muy pronto tengamos en esta mesa, en la sala Cisneros, a nuestros colegas de Centroamérica y, porque no decirlo, del Caribe. Estoy seguro que su adhesión a la ALADI no solo será para dar continuidad geográfica a nuestra Asociación sino que además enriquecerá nuestros trabajos con su valiosa participación.
También espero que en muy corto plazo se pueda concretar la integración de Nicaragua, que está en su fase final, y porque no decirlo de Guatemala que ha mostrado algún interés en ello.
temas más importantes y de interés para todos o para algunos miembros, pero no quisiera concluir esta intervención sin antes agradecer especialmente a la Secretaría General; a nuestro Secretario General; a los Subsecretarios César y Pablo; a los Jefes de Departamento, Roberto y Carlos; a María Clara de la Oficina de Asuntos Institucionales y Comunicación; a Carla Risso de Finanzas; a Luciana de Jurídica; y a todo el personal técnico, a los intérpretes, a Pedro de Protocolo, al personal administrativo; y muy encarecidamente a nuestro estimado amigo, Ricardo Mitre, que está aquí con nosotros. Gracias a todos y cada uno de los integrantes del personal administrativo de ALADI por su esfuerzo, por su dedicación y por el compromiso con esta Asociación.
Finalmente, quisiera aquí hacer un reconocimiento al Embajador que me anticipó en el cargo, a Cassio Luiselli y a su Alterna Dora Rodríguez, que se dieron el tiempo para platicarme de todas y cada una de las áreas de oportunidad que se tienen en esta responsabilidad y concluir agradeciéndole al equipo de la Representación de ALADI, a Alejandro de la Peña, a Oscar Gallegos, a Diana Morales que próximamente tendrá mayores responsabilidades, muchísimas gracias a todos.
Siempre las despedidas para un servidor son difíciles, aprecio mucho su paciencia, aprecio mucho su disposición, su orientación y si de manera involuntaria cometí alguna falta con alguno de ustedes les pido una disculpa. Muchísimas gracias.
PRESIDENTE. Muchas gracias, señor Embajador Enríquez. Quisiera dejar abierto el uso de la palabra. Señora Embajadora de Brasil adelante. | |