...PRENSA


El Comité de Representantes recibe a la señora Estela B. de Carlotto, declarada "Ciudadana Ilustre de América Latina".
Palabras del Ministro de Relacione sExteriores del Uruguya, Luis Almagro Lemes
10/02/2014

Coherencia, fortaleza, dignidad, tenacidad, tienen que ver con la lucha que en determinado momento, tiempo crítico de la historia y de su vida, se planteó Estela Carlotto. Su lucha nos representa a todos porque esa lucha tiene que ver esencialmente con la dignidad humana, tiene que ver con todos nosotros, con aquellas cosas que queremos que sean buenas, queremos que sean dignas, queremos que sean justas.

Obviamente, el ejemplo de ella es fundamental para todos los que estamos acá, ella nos ha ilustrado un camino porque había que tener mucha convicción adentro, mucha militancia adentro, mucha capacidad de lucha adentro para sobreponerse a todos estos límites que se le ponían a la justicia y a la verdad en su momento. Luchas que son fundamentales porque no terminan nunca y debemos mostrar también esa misma capacidad, esa misma coherencia, esa misma fortaleza, esa misma dignidad, esa misma tenacidad que nos ha mostrado Estela Carlotto.

Esa lucha es fundamental y esencial para todos nuestros países de Latinoamérica, por eso nada más justo que este reconocimiento. Nada más justo porque nos mostró también las cosas que vienen de la sociedad civil, desde el ciudadano puro, simple, llano, para sobreponerse a las agresiones más feroces o más violentas del poder, para sobreponerse a los obstáculos más fuertes que nos puede pasar, los sistemas políticos o las dictaduras más abyectas con las que se han debido enfrentar en este tiempo los luchadores por los derechos humanos, la sociedad civil.

Este reconocimiento arranca desde Uruguay propiamente porque ella es un ejemplo para Uruguay esencialmente, y lo es hoy porque hay luchas y responsabilidades que Uruguay todavía tiene pendientes. Uruguay fue parte de la represión y el crimen, Uruguay fue parte de la mentira, esa mentira que se extendió en el tiempo cuando se decía que acá no había hijos de desaparecidos, por ejemplo por parte de figuras de nuestro sistema político. Uruguay fue parte de la injusticia, aún lo es porque no todo el mundo sabe la verdad todavía en el Uruguay, ni todo el mundo ha tenido su reparación.

En el país de las cosas no resueltas, ese país no es el país del nunca más, puede ser el país de las cosas que siguen pasando, por eso definitivamente necesitamos verdad y justicia porque es lo que debemos legar al mundo del futuro, es lo que debemos dejar, no para nuestra generación sino para las generaciones que vienen, para que nunca más haya nietos desaparecidos, para que nunca más haya una agresión contra un niño por parte de un sistema político, porque nunca más haya una violación de derechos humanos sobre la niñez en ningún sistema político latinoamericano.

El crimen contra un niño es absolutamente injustificable, es hasta contrario a la naturaleza, por eso es bueno refrescar memoria, ese banco de datos genético que guarda el ADN de la identidad de nuestros pueblos, la genética de nuestra luchas y de nuestros idearios, y nadie encarna mejor eso que Estela Carlotto. Porque nuestras luchas nos identifican, la lucha por la democracia, la defensa de los derechos humanos, la lucha por la dignidad de los países, de las naciones hermanas y soberanas.

Hace más de tres décadas representaban a este continente, por ahí, por los foros internacionales, los personajes más abyectos de la diplomacia uruguaya, defendiendo violaciones de derechos humanos, y no hay que el tiempo y la pastilla del olvido cura las heridas, hoy sabemos que no es el tiempo sino la verdad y la justicia la que cura las heridas. No podemos perder nunca la memoria de la aberración de las dictaduras de América Latina, no podemos legar hacia el futuro conceptos bastardos en materia de derechos humanos con dobles estándares, con mentiras, verdades falseadas y bastardeadas, no podemos ni pensar en perder democracia o la más plena vigencia y protección de cada uno de los derechos. Por eso Estela es ilustre, es singular, es un ejemplo, como buena docente que és nos ha enseñado buena parte del camino que debíamos recorrer y que aún debemos recorrer en nuestra América.

Tenemos que reconocer aquí, en ella, que nos ha regalado felicidad a todos, como decía “Chacho”, nos ha curado del escepticismo, nos ha dado esperanza contra el escepticismo, nos ha afirmado contra la negación, nos ha devuelto las más hermosas instancias humanas que podemos concebir, esas que tienen que ver con la valentía, con la ternura, conceptos que el Che Guevara puso juntos en determinado momento.

Es el derecho a la verdad y a la justicia y es el heroísmo de esta persona que nos devolvió tanta dignidad humana en momento tan aciagos para nuestros pueblos, demuestra que jamás debemos renunciar, demuestra que nuestro camino hacia adelante y demuestra que estamos llenos de futuros, como está ella llena de futuro con su nieto.

Mi reconocimiento y el reconocimiento de todos los países de Latinoamérica a esa lucha incansable y a tanta verdad, tanto sacrificio, tanto heroísmo, a tanta docencia, tanta enseñanza, tanto ejemplo, tanta dignidad, tantas cosas buenas que nos ha dejado, que nos ha ido permeando a cada paso que ha dado. Muchas gracias.