Celebramos hoy la sesión 869 del Comité de Representantes Permanentes de la ALADI, en la que nos acompañan los países y organismos observadores, autoridades de gobierno, cuerpo diplomático, académicos, empresarios e invitados especiales, para recibir en esta sede al Excelentísimo Señor Embajador Tatsuo Arima, Enviado Especial del Gobierno del Japón a la Cumbre de MERCOSUR, y al acto que hoy celebramos: la incorporación del Japón a la ALADI en calidad de país Observador. Agradecemos su visita especial, puesto que nos permite poner de manifiesto el interés mutuo que nos asiste, tanto al Gobierno Japonés como a todos nuestros Países de estrechar nuestros vínculos económico-comerciales.

(Bienvenido, esta es su casa): yo cosó, dozo okutsu logui kudasai.

Señor Embajador Arima :En nombre del Comité de Representantes de la Asociación, quiero manifestar, que nos sentimos muy honrados y complacidos con su visita, por la importancia de Japón en la economía mundial y adicionalmente, como socio estratégico de América Latina.

Reconocemos y valoramos Sr. Embajador su amplia trayectoria en el sector público como Secretario particular del Ministro de Relaciones Exteriores; Consejero Político de la Embajada de Japón en Washington; Cónsul General en San Francisco y Embajador en los Países Bajos y Alemania; así como en el ámbito privado como Asesor y Miembro del Consejo de Mitsubishi Corporation, entre otros.

Quiero recordar en esta fecha, cómo en la década de los 80s, América Latina observaba con admiración el éxito ya logrado por el modelo nipón y las lecciones de los modelos asiáticos que iniciaban la consolidación de un sistema de industrialización acelerada que le posibilitaría, entre otros logros, reducir los niveles de pobreza, aumentar los niveles de empleo y en general elevar el bienestar de toda su población.

Muy especialmente en el caso japonés, el Estado y las empresas lograron que el conocimiento científico y tecnológico, bajo un sistema educativo coherente y políticas sólidas a largo plazo en todo los sectores, convirtiera al país en una potencia en donde el fomento de la ciencia y la tecnología surgen como respuesta a las necesidades del Estado y de la sociedad civil jugando un papel decisivo en el rumbo favorable que tiene hoy en día este país, ejemplo fehaciente para el desarrollo de América Latina.

En el comienzo de la década de los 90’s, el cambio en la estructura del sistema internacional coincidió con el inicio de un proceso de reestructuración y apertura de las economías latinoamericanas, a las corrientes de comercio e inversión, lo que favoreció un proceso de extensión de los vínculos políticos y económicos con Asia Pacífico y especialmente con Japón.

Hoy en día, se están abriendo posibilidades para el establecimiento de una nueva conexión asiática a partir de las inversiones de estos Países en América Latina, con el fin de lograr una integración productiva en sectores manufactureros, con transferencia de tecnología y capacitación de recursos humanos.

El incremento de las relaciones tanto económicas como comerciales, entre América Latina y Japón, se ha visto reflejado en los diferentes acuerdos firmados, como el de México y Japón; e igualmente lo podemos apreciar con la participación de nuestros Países en diversos foros y mecanismos multilaterales como el APEC (Consejo Económico del Asia Pacífico), el PBEC (Foro de Competitividad para Comercio e Inversión) y finalmente en el FOCALAE (Foro de Cooperación América Latina y Asia del Este). Actividades estas que, día a día estrechan más los vínculos de amistad y comercio entre las dos regiones.

Es por esto, Estimado Embajador, que celebramos la vinculación de Japón como miembro observador de la ALADI, porque comprendemos que un acercamiento de su Gobierno a la Asociación, redundará en el fortalecimiento del entendimiento mutuo, la generación de nuevos lazos económicos y comerciales, al igual que la cooperación entre nuestras naciones.

Solo me resta asegurarle excelentísimo embajador Tatsuo Arima en nombre del Comité y en el mío propio, la mejor disposición para que la incorporación de Japón como Observador en esta Asociación, sea provechosa en beneficio de su país y las naciones miembros de la ALADI.

Muchas Gracias (Arigato Gosaima Shita)