Bienvenidos todos a esta sesiòn extraordinaria del Comité de Representantes que tiene como único objetivo incorporar a los dos países amigos de nuestra región como observadores en este Comité.
En mi calidad de Co-Presidenta del Comité de Representantes Permanentes de la ALADI, quiero dar la más cordial bienvenida a los excelentísimos señores embajadores Fernando Valderrama y de Pareja, en representación del Reino de España, y al excelentísimo embajador Giorgio Malfatti di Monte Trento, en representación de la República Italiana.
La presencia de ustedes hoy en este comité resulta realmente estimulante y representativa de una realidad que día a día va tornándose mas clara: el necesario acercamiento entre nuestros países, entre nuestros continentes, como respuesta a un mundo que reconoce cada vez más, la necesidad de integrarse y de compartir responsablemente una suerte común.
América Latina - aquí estamos sentados doce países de la región- y Europa se asemejan mas entre sí, que países de otros continentes como por ejemplo el africano y el asiático. Tenemos valores compartidos y situaciones socio económicas que nos permiten sentir semejanza y cercanía. España e Italia están unidas a América Latina por raíces comunes históricas, espirituales y culturales. Compartimos los ideales de libertad, y solidaridad y la clara decisión de superar la pobreza humana y ambiental de nuestro planeta.
América Latina, y muy particularmente los doce países que tenemos asiento en este comité, hacemos esfuerzos permanentes por integrarnos, por lograr una región cada vez más saludable, más próspera, capaz de un desarrollo sostenible en un entorno de paz y con respeto a los Derechos Humanos Universales.
Señores embajadores, dado que sus Estados participaron como propulsores de ese exitoso proyecto económico, político y social que hoy se concibe en la integración de 25 Estados en la Unión Europea, sus aportes serán esenciales para acompañarnos en nuestro camino hacia una integración regional.
Hoy, nuestra asociación cumple los mandatos emanados de la Decimotercera Reunión del Consejo de Ministros, cuya resoluciones 59, 60 y 61 postulan la creación del Espacio de Libre Comercio (ELC) entre los países miembros. Nuestro norte fundamental, nuestra hoja de ruta es responder a este reto, conscientes de ser eslabones fundamentales en el logro de ese gran objetivo y ustedes, excelentísimos embajadores, son desde hoy, testigos cercanos en este proceso.
Miramos con esperanza, que esta presencia de ustedes pueda reflejarse en un dialogo mas profundo, que nos permita avanzar con fortaleza y enriquecidos por la experiencia de las naciones que ustedes representan.
Quiero recordar que en el ámbito comercial, la Unión Europea se ha transformado en el segundo socio de mayor relevancia para la región latinoamericana, pues no más en el 2004 las exportaciones hacia dicho bloque europeo se acercaron a los 52 mil millones de dólares, mientras que las importaciones estuvieron por el orden de los 50.500 millones de dólares, lo que se tradujo en un beneficio comercial para nuestros países en conjunto de 1.500 millones de dólares.
Estimados representantes del Comité, permítanme presentarles la trayectoria del embajador Fernando Valderrama y de Pareja. Es licenciado en derecho y diplomado en Ciencias Políticas, ingresó en 1999 a la carrera diplomática, lo que hizo que el colegio de abogados en España perdiera a un prominente jurista, pero la cancillería española ganara al excelente diplomático, que hoy nos acompaña.
Sus destinos han sido variados y muy enriquecedores, pues no en vano fue enviado a cumplir las misiones de la representación ibérica en países con una cultura ancestral como la de Etiopía, Libia, Marruecos, Israel e Irak.
Quiero, Embajador Valderrama saludar a su esposa Dafne y sus hijos Fabrique y Gil Mar, quienes lo han acompañado en todo su periplo y son también parte de nuestra comunidad.
Como si esto no fuera suficientemente engalanador, también tengo el agrado de presentar al embajador de la República Italiana, Giorgio Malfati di Monte Tretto, doctor en ciencias Políticas en la Universidad de Roma. En 1975 ingresó a la carrera diplomática y luego de haber prestado servicio en la Dirección General de Asuntos Políticos y en el gabinete del Ministerio de Relaciones Exteriores fue designado Cónsul en Sydney y Primer Secretario de la Embajada de Italia en Atenas.
El ejercicio de su vocación y servicio a su patria lo han llevado a trabajar en destinos diversos como Cuba, Kazakhstan y Khirgistan. Igualmente quiero hacer un reconocimiento a su señora Desirée, y a su hijo, Cristiano. Desirée, además de ser ciudadana de nuestra región, se desempeña actualmente como Presidente de la Asociación de Damas Diplomáticas en Uruguay. (ADA).
Embajadores Valderrama y Malfatti, les reiteramos la bienvenida a la ALADI, la casa de la Integración.
Muchas gracias |