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Despedida del Comité de Representantes de la Excelentísima señora Embajadora Digna M. Donado como Representante Permanente de Panamá
Discurso del la Excelentísima Embajadora Digna M. Donado, Representante Permanente de Panamá
10/01/2014

Muchas gracias, Presidenta. No quiero que me ataque la parte sentimental, así que estoy haciendo fuerza para hablar sin sentimentalismos, tratando de que la lógica impere antes que el sentimiento.

Mi tránsito por ALADI realmente no fue fácil, tal como lo describió Chacho. Llegué y estuve prácticamente dos años como observadora haciendo todas las negociaciones con nuestros ministros, y aquí tengo que hacer un reconocimiento público a alguien que está ausente, Cassio Luiselli, Embajador de México, que luchó denodadamente por el ingreso de Panamá.

Una vez que logramos la firma del TM80 inmediatamente abrimos en Panamá la EXPOCOMER de 2012 –año en que también entramos a la ALADI– con una sala completa celebrando la entrada de Panamá a la ALADI. Invitamos a todos los países pertenecientes a la Organización, los cuales contaban cada uno con un stand para que pudieran presentar sus productos y promocionarlos, junto a todas las entidades panameñas y de otras áreas con las que en ese momento el Ministerio de Comercio y Relaciones Exteriores estaba involucrado.

De alguna manera fue la bisagra de la idea que presentó Chacho de hacer algo más grande, precisamente esta EXPO 2014 con rondas de negociaciones, de ampliarla a los comerciantes que pertenecen fundamentalmente a la Institución y agregando a otros empresarios que han sido atraídos hacia esos empresarios involucrados con nosotros.

Esto ha sido un esfuerzo realmente digno de celebrarse, además, por el beneficio y el objetivo que hemos llegado a alcanzar. Hemos llegado prácticamente a culminar 5
con lo que nos propusimos. Sin haber hecho el 100% prácticamente podemos decir que lo tenemos casi todo.

Presidenta, discúlpeme por mi comentario sobre México en la sesión anterior, lo dije porque nos encontró a todos diciendo que teníamos que buscar fondos de todas maneras, de donde sea, porque no puede ser solo un país el que nos ayude a realizar esto.

El Embajador Mernies ha sido un director ejecutivo permanente. Ha logrado, junto con todo el equipo ad hoc, configurar el objetivo que lograremos en esta EXPO. Estoy completamente segura de lo que lo vamos a lograr.

Asimismo, puedo decir que mi ida en este momento es virtual porque estaré en el mes de octubre, estaré siempre en todas las actividades que la ALADI tendrá en la EXPO ALADI durante los días 8 y 9 ya que tengo que asistir al Viceministro de Comercio Exterior de Panamá que llegará el día 8. Ya me comprometí con él a atenderlo y a introducirlo con lo que es ALADI porque el desconocimiento que hay en Panamá de ALADI es realmente increíble. Es a lo que me he dedicado en estos cinco años, tratando de hacer conocer a ALADI.

Tuve la suerte de tener por lo menos por algunos meses a una licenciada, Mara Pardo, muy importante y básica para la labor que estábamos haciendo. Me ayudó muchísimo. Desafortunadamente se tuvo que ir y volví a quedar sola, como usted bien lo dijo y como lo dijo Chacho. Ha sido más el tiempo que he estado sola que acompañada y muchas veces mal acompañada porque tuve a un Alterno que casi nos vuelve locos a todos. Fue parte de la historia que escribiré algún día de lo que sucedió en ALADI.

Seguiré luchando por ALADI, seguiré luchando por la integración latinoamericana, creo en la integración, siempre creí en la integración, nunca la palpé como la palpé en ALADI y por eso confirmo las palabras de Chacho cuando dijo que mis esfuerzos fueron más dedicados a ALADI que a la relación bilateral. Hice labores con la bilateral pero fueron muy pocas. Me desbordé con ALADI porque entendí qué era la integración. Sabía lo importante que era para toda Latinoamérica poder confirmar esa integración.

Desafortunadamente, no tendremos una integración total hasta el momento en que no podamos transitar las mercancías desde la Patagonia hasta México de una manera libre y sin cortapisa. En Panamá, por problemas sanitarios, el territorio fronterizo con Colombia, el tapón del Darién, no se abre por el asunto de la aftosa. No se ha abierto en decenios y no sabemos cuándo se podrá abrir. Por lo tanto, hemos hecho un proyecto que lo dejo en manos del nuevo Embajador, que espero que lo desarrolle como nuevo gobierno. Posiblemente lo solucionemos por otra vía, que tendría que ser acuática, para unir a través de Colombia y Panamá ese vacío que tenemos en este momento para que la mercancía viaje con mayor rapidez y seguridad a través del continente.

Ahora mismo Panamá tiene inconvenientes en sus exportaciones. Es la lucha que he tenido con los exportadores porque exportar un producto para aquí, sobre todo si es comestible, demora más que exportarlo a Europa. Por ejemplo, la piña, que se exporta con tanta facilidad a Europa y a Estados Unidos, demora 18 días, y para llegar aquí a Uruguay demora más de 30 debido a las escalas que tiene que hacer en Brasil y en Argentina. No hay fluidez de barcos, el flete es caro, el impuesto local al consumidor es alto y hace al producto muy caro. He conversado con los exportadores panameños muchas veces y me han hecho ver eso.

Por todos estos problemas nosotros no tenemos mayor interés en el sur. Yo les he platicado acerca de esa posibilidad, de hacer ese lazo y a través del mar. Tenemos que hacer algo. No podemos dejar roto el camino, tenemos que unirlo de alguna manera, y encontrar algo semejante a Buquebús y a los problemas que tiene Buquebús, por decirlo en buen castellano.

De alguna manera, se trata de apresurar la comercialización de los productos a través de Colombia y Panamá, ya sea por el Pacífico o por el Atlántico, que podamos conseguir porque, afortunadamente, Panamá cuenta ahora mismo con los puertos más grandes y más importantes que hay en Latinoamérica.

Eso en cuanto a la comercialización, pero quiero decir que para mí ALADI ha sido una escuela humana, donde he conocido gente muy importante. He encontrado amigos, personas que realmente he llegado a apreciar mucho, hemos compartido amistad, momentos difíciles que hemos hecho fáciles, buscando siempre la solución.

Espero que eso continúe así y que los nuevos representantes que lleguen a este reciento tengan el mismo sentimiento y de alguna manera vean que ALADI es algo importante. ALADI no nació ayer, tiene muchos años de existencia pero parece que mucha gente no la conoce. Tenemos que divulgar más a la ALADI por todos los países de Latinoamérica.
No podemos quedarnos en el Cono Sur. Hay que ir más allá. México está al norte, el Cono Sur está aquí pero también está Centroamérica y el Caribe en el medio y está vacío. Tenemos que llenarlo, que atraerlo, amarrarlo. La única manera es buscando la vía de comunicación.

No me despido, les digo solamente un hasta luego porque espero seguir en contacto con ustedes a través de proyectos que había desarrollado y que dejaré en manos del nuevo Embajador. Ojalá se logren desarrollar pero necesitan a ALADI para poder seguir progresando.

Yo sé que de esta primera macrorrueda de negocios va a salir otra, tengo la plena seguridad de que va a ser así. Se van a dar cuenta de lo que es ALADI.

Quiero darles las gracias a todos los compañeros, Embajadores, Alternos, miembros de la administración de ALADI, especialmente a Pablo, que no dejó en ningún momento de apoyarnos, al Embajador Mernies, que fue un amigo, y no sigo porque se me salen las lágrimas.