Les agradezco muy sinceramente los generosos conceptos que fueron expresados en la sesión del día de hoy.

Deseo dar las gracias a los señores Embajadores y a los demás funcionarios de las Representaciones por el apreciable apoyo que me dispensaron durante el tiempo en que colaboré en la Asociación.

Igualmente, quiero reconocerle a mis compañeros de la Secretaría su eficaz tarea y el respaldo que recibí de su parte en estos dos años y medio.

Al Subsecretario Isaac Maidana, le expreso mi agradecimiento por su generosa amistad y estímulo para la realización de mis tareas, solicitándole transmitir mi respetuoso saludo al Sr. Secretario General, Húgo Saguier, y hacerle presente mis deseos por que su gestión sea destacada y relevante

Al inicio de mis estudios universitarios el, representante de México ante la ALALC en aquel tiempo, dictó una conferencia sobre los objetivos de la Asociación y quedé convencido de que el organismo era trascendente. Cuando acepté la oportunidad que se me brindó de colaborar con la ALADI lo hice bajo el mismo convencimiento y hoy, que concluyo ni encargo, tengo igual convicción de que el organismo es valioso e importante para América Latina.

A fines del 2005, cuando asumí la Subsecretaría, teníamos frente a nosotros las resoluciones adoptadas en el XIII Consejo de Ministros y para iniciar la tarea que se me encomendó, elaboré un documento que lleva el nombre de Marco de Negociación para el Espacio de Libre Comercio.

El documento planteaba la necesidad de hacer una reflexión en el alto nivel de los países miembros sobre los temas siguientes:

Definir el Espacio de Libre Comercio y sus alcances para la creación del Mercado Común Latinoamericano.

Acordar modalidades y calendarios posibles de negociación.

El papel de los órganos de la ALADI y otras instancias requeridas para el proceso del ELC, y

Evaluar a la propia ALADI como institución para alcanzar los objetivos del ELC y los ajustes requeridos.

Estimo que las diferentes reuniones y deliberaciones por parte de la Asociación fueron dando respuesta o contenido a lo anterior; sin embargo parecería que aún hay camino por recorrer.

En este trayecto observé también como se fueron plasmando nuevos o mayores alcances en el ámbito de las tareas de la ALADI.

Los representantes de los países miembros y los diferentes invitados a esta sede destacaron la necesidad de tener presente el tema del alivio de la pobreza y de que la integración era uno de los caminos que debería estimularse para lograrlo.

Carlos Fuentes sintetizó este interés de nuestros países cuando afirmó que hoy contamos con democracia y sus diferentes manifestaciones como son partidos políticos, procesos electorales y parlamentos, pero –afirma Fuentes- aún no hemos llegado a la gran democracia: la que alcanza los alimentos, la salud, la vivienda y, en fin, el bienestar a la población.

Aprecié también que hay un interés principal en avanzar hacia una integración que fuera más allá de lo puramente comercial o económico, abarcando fundamentalmente los temas sociales.

Parecería que Jean Monnet, el arquitecto de la Unión Europea tenía razón cuando dijo que frente a la letra “C” de la palabra Comercio, el prefería anteponer la letra “C”, de la palabra Cultura para la integración.

Los países miembros destacaron también en este lapso el interés por la cooperación regional, dando impulso a materias como el de las pequeñas empresas y otras áreas de promoción económica; creo sin embargo, que debiera haber una constante y reiterada referencia al tema de la facilitación del comercio, lo que será un valioso aporte de la ALADI al comercio regional.

La Asociación seguirá trabajando en sintonía con los países miembros para alcanzar las metas trazadas y para contribuir a enfrentar los retos presentes de la región y sus nuevos desafíos. Estoy seguro de que las tareas de la ALADI seguirán siendo de fundamental importancia para América Latina.

Para concluir deseo agradecer al Embajador de México Cassio Luisseli su apreciable amistad y valiosas orientaciones.

Así también, le doy las gracias a la Ministro Dora Rodríguez por su permanente apoyo y muestras de aprecio, deseándole el mayor de los éxitos en sus tareas próximas en la Asociación.

Ha sido para mi en una invaluable experiencia haber colaborado con la ALADI, cumpliendo así con una antigua meta personal de participar en sus tareas para desarrollar y fortalecer la integración regional.