 | Nos encontramos hoy nuevamente en un Consejo de Ministros de esta Asociación. Ha pasado poco más de un año desde el anterior encuentro, pero en este lapso de tiempo la agenda internacional registra hechos significativos, cuyos impactos estamos sufriendo. Vivimos un tiempo de crisis, no originada en nuestros países ni vinculada a los procesos de apertura comercial.
Por ello, celebramos la realización de esta reunión como una posibilidad más de diálogo, de intercambio de experiencias y de coordinación para llevar a cabo acciones concretas con miras a profundizar el proceso de integración regional, que nos permitan mitigar el impacto de la actual crisis y estar mejor preparados para el momento en que la crisis comience a ceder. Es posible, que uno de los fenómenos de la post crisis sea el fortalecimiento de la integración económica en bloques regionales y sub-regionales y allí tenemos un déficit comparado con otras regiones del mundo.
Es justamente en este marco, que saludamos con especial satisfacción el ingreso de Panamá como miembro pleno de la ALADI. Chile y Panamá mantienen una activa vinculación bilateral, cimentada en una profunda relación histórica y, desde la perspectiva comercial, basada en el Tratado de Libre Comercio, suscrito en febrero del año 2006 y vigente desde el 7 de marzo de 2008.
En nombre del Gobierno de Chile, quiero expresar nuestra más que calurosa bienvenida a Panamá, representada en esta ocasión por la Sra. Ministra de Comercio e Industrias, Licenciada Gisela Álvarez. Y esperamos que el carácter latinoamericano de esta Asociación continúe reforzándose en el futuro.
Estimado Presidente:
Chile otorga una especial prioridad a la relación con América Latina y, en ese marco valoramos a ALADI. Esta relación privilegiada tiene un sinnúmero de expresiones concretas como nuestra participación como fundadores de esta misma organización, nuestro vínculo como miembro asociados de MERCOSUR y de la CAN. Tenemos, asimismo, Acuerdos Comerciales con todos los países sentados en esta mesa, así como con el resto de los países latinoamericanos.
Desde la óptica económico-comercial, el pasado año, nuestra balanza comercial mostró un déficit con la región, llegando a más de 6.000 millones de dólares, no obstante globalmente tuvimos un superávit de 18.000 millones de dólares. Desde la perspectiva de las inversiones, a diciembre de 2008 Chile registra US$ 47.000 millones materializados en el exterior, más del 80% ha tenido como destino a Latinoamérica, generando más de 200.000 empleos.
Chile cree que la integración es una herramienta valiosa, útil, necesaria y con potencialidades que aun no descubrimos en toda su dimensión. La integración vista como proceso nos permite entender que ella, en la perspectiva del tiempo, presenta momentos de avances, muchas veces a velocidades distintas. También existen períodos de pausa para la evaluación y la reflexión.
Hoy, con el conjunto de Resoluciones que se aprobarán, estamos retomando un camino dinámico. ALADI no sólo actualiza su agenda, sino que la amplia y la potencia. Incorporamos la dimensión social. Todos queremos el progreso económico para mejorar el nivel de vida de nuestros ciudadanos, en especial de los que presentan una situación más precaria. En esta misma sala, en julio del pasado año, la presidenta Bachelet manifestó que “no existe una disyuntiva entre avanzar en una agenda económico-comercial, y avanzar en la agenda social”. Lo relevante es justamente avanzar en ambos sentidos, pues el tiempo perdido es irrecuperable y lo más complejo aún es que hay muchos ciudadanos que están esperando y necesitan recibir los beneficios derivados de un mayor crecimiento económico. Del mismo, modo se han identificado áreas específicas en la cual la Asociación puede cooperar para mitigar los efectos de la crisis económica por la que atravesamos. Reforzaremos nuestro diálogo con la sociedad civil, en especial con los trabajadores y empresarios. Adoptamos, asimismo, un Plan de Acción en favor de los Países de Menor Desarrollo Relativo. Igualmente, entregamos un mandato para actualizar los Regímenes de Origen y Salvaguardia y para continuar el proceso negociador con miras a finalmente tener un Régimen Regional Supletorio de Solución de Controversias. Finalmente, convocamos a la Conferencia de Evaluación y Convergencia, que tendrá que analizar en profundidad la marcha del proceso de integración. No puedo dejar de expresar nuestra especial satisfacción por la próxima puesta en marcha, en la fase experimental, del Proyecto de Emisión Digital de Certificados de Origen. Este es un elemento concreto de modernización, de facilitación del comercio y de cooperación con el sector privado. Indudablemente, debemos profundizar en esa línea de trabajo.
Sin dudas, este conjunto de materias antes señaladas, demuestran la capacidad y flexibilidad de nuestros países para arribar a acuerdos. Podemos congratularnos por ello.
El camino ha sido largo desde octubre del año 2004, cuando el XIII Consejo de Ministros adoptó, entre otras, la Resolución 59. Chile hubiese querido que el tiempo transcurrido fuese menor. También podríamos señalar que aspirábamos a textos más profundos y ambiciosos, pero preferimos resaltar el hecho político que nuestros países, a pesar de tener aproximaciones u ópticas distintas en algunas materias, han tenido la capacidad, flexibilidad y visión para arribar a acuerdos que envían una potente señal, en momentos de inquietud, a la Comunidad Internacional respecto del compromiso efectivo de de 12, ahora 13 países, con la integración.
Señor Presidente,
La tarea no está concluida, es más estamos muy distante de ello. Debemos apurar la marcha. Por ello, desde mañana hay que comenzar a trabajar en la implementación de nuestros acuerdos. Para ello, además de la voluntad política de todos los miembros, requerimos seguir contando con el apoyo de una Secretaría General eficiente, dinámica y moderna.
Chile reitera en esta oportunidad su disposición para colaborar para que este conjunto de Resoluciones cobren una dimensión concreta en el más breve plazo.
Muchas gracias | |